Si Vivian Maier te deslumbró el año pasado, esto te va a interesar. Martín Chambi (Perú, 1891-1973), de sangre quechua, es considerado el primer fotógrafo indígena del mundo, y retrató con gran dignidad la realidad cotidiana y mágica del pueblo andino. Reconocido en gran parte del mundo y siendo uno de los artistas peruanos más relevantes del siglo XX, es que su obra vuelve a Chile al Centro Cultural de Las Condes hasta el 5 de junio con Martín Chambi: La Luz de la Tierra. Y digo vuelve, porque el artista ya había expuesto en Santiago en 1936.


Chambi nació en un pequeño pueblo cercano al lago Titicaca, en el departamento peruano de Puno, en medio de Los Andes. Su destino pudo ser uno muy diferente al que conocemos, pero un encuentro con el fotógrafo de la mina de oro de capital británico en la que trabajaba su padre cambió su historia para siempre. Deslumbrado con las cámaras, recibió el apoyo de su padre para aprender del oficio junto a un fotógrafo en Arequipa, teniendo su primera exposición en esa ciudad en 1917. Posteriormente se trasladaría a la ciudad de Sicuani, donde montó su primer estudio y taller; y luego, en 1920, se establece en Cusco, en donde desarrolla su más importante obra, viviendo en la antigua capital inca hasta su muerte.
La fotografía de Martín Chambi traspasó fronteras, siendo expuesta tanto en distintas ciudades de Perú como en La Paz (1925), Santiago (1936) y Nueva York (1979). En paralelo, también desarrolló una importante carrera como reportero gráfico entre 1918 y 1930 para publicaciones peruanas y argentinas, e incluso para El Mercurio de Santiago. Más tarde también sería publicado en la prestigiosa revista National Geographic, en 1938. Su archivo bordea los 30.000 negativos, material que se encuentra en perfecto estado de conservación en Cusco bajo la dirección de uno de sus nietos, y terminaría de digitalizarse a fines de este año.



La muestra La Luz de la Tierra, que se presenta en Las Condes, se compone por 90 fotografías, entre clásicas e inéditas, e incluye tres imágenes de Santiago y una de Valparaíso, tomadas por el artista durante su visita a nuestro país en 1936. Y, al igual que en la anterior exposición de Vivian Maier en el mismo recinto, se trata de copias analógicas, es decir, que fueron ampliadas de la forma tradicional con luz, sin pixeles.
El nombre de la exhibición, La Luz de la Tierra, -que es traída a Chile por la Corporación Cultural de Las Condes junto a la Embajada del Perú– creo que no pudo ser mejor escogido. La fotografía de Chambi se rodea de esos dos conceptos: su formidable uso de la luz y el retrato de su tierra, de su pueblo.


Las composiciones de Martín Chambi emocionan y conmueven (algo con lo que la ambientación y música de las salas de exposición contribuyen, también). Son imágenes que retratan una sociedad de tradiciones prehispánicas pero que convive con la primera llegada de la modernidad del siglo XX, que a través de sus luces y sombras dibujan las formas de su gente y su entorno sin caer en lo documental, sino que con gran admiración y honor. En palabras del montaje, “desde la dignidad de un pueblo sometido pero jamás humillado”. Menciono tanto a Vivian Maier porque recuerda mucho a su trabajo, aunque le precedió por décadas, al igual que a Sergio Larraín. Los rostros, los paisajes, las vestimentas, todo es retratado de forma sensible y sutil. Y verlas resulta toda una experiencia, un viaje emocional en el tiempo.


Algunas cosas no cambian, no?
Martín Chambi: La Luz de la Tierra
Del 6 de abril al 5 de junio de 2016.
Centro Cultural Las Condes
Apoquindo 6570 (entrada por Ntra. Sra. del Rosario), Las Condes.
De martes a domingo, de 10.30 a 19hrs.
Entrada liberada.